Agrega valor al mejorar la comprensión de problemas complejos, optimizar la planificación de soluciones, diseñar soluciones efectivas, reducir errores y mejorar la precisión, incrementar la eficiencia del proceso, mejorar la toma de decisiones, facilitar la comunicación, ofrecer adaptabilidad y escalabilidad, incorporar nuevas tecnologías, y proporcionar una ventaja competitiva.