Ofrece valor agregado en la adopción progresiva de productos más complejos y de mayor calidad biofarmacéutica, así como en avanzar en la producción de biofármacos, innovar en ingeniería genética, optimizar procesos, apoyar la investigación y desarrollo, aplicar técnicas clínicas y terapéuticas, mejorar la sostenibilidad, desarrollar capacidades técnicas, cumplir con normativas, impactar positivamente en la salud pública y fomentar la colaboración interdisciplinaria.